Llega un instante en el que un negocio se encuentra con necesidades que antes no tenía, nuevos escenarios a los que hay que hacer frente para continuar creciendo. De manera natural, las pymes tienden a optimizar la eficiencia de sus recursos y se plantean lanzar una aplicación móvil, con la que dar un impulso considerable a las ventas.
Así lo indican los responsables de la compañía de mobile intelligence eMMa (https://emma.io/es/), quienes comentan que, a pesar de ello, conviene saber cuándo es el mejor momento para dar este paso. Existen, por suerte, beneficios e indicaciones que permiten averiguar si se ha llegado a ese punto en el que merece la pena apostar por ello. Desde la empresa explican que, sin duda alguna, desarrollar una aplicación es una de las decisiones más rentables que todo negocio puede tomar. Sin embargo, con un usuario mobile cada vez más exigente y una competencia feroz, es vital lanzar una aplicación que marque la diferencia, teniendo muy claro qué necesidad se podrá cubrir de una forma única, atractiva y escalable.
Por eso, y a través de una infografía, esta compañía detalla cómo saber cuándo es el momento para lanzar una app y destaca las tres premisas clave:
– Los competidores ya disponen de una aplicación móvil. Siempre conviene ser el primero en dar este paso, pero en pleno 2016 esto ya es difícil. Aun así, llegados a este punto se puede estudiar el volumen de descargas de sus apps, para valorar si vale la pena abrir este canal, su puntuación global y, sobre todo, las valoraciones de sus usuarios, para diseñar una app que se adecúe a sus necesidades y a las oportunidades libres de competencia.
– El tráfico de la página web es mayoritariamente mobile. Si bien lo habitual es que los visitantes vengan cada vez más de dispositivos móviles, llegará un punto en el que su porcentaje total será especialmente relevante. Es en ese momento en el que puede ser interesante acabar de confirmar que lanzar una app no será algo precipitado ni un paso en falso.
– Se puede disponer de contenidos que promocionar. No hay nada como hablarle de tú a tú a los clientes. Con las potentes posibilidades de segmentación que existen actualmente, comunicarse con las diferentes tipologías de consumidor de una forma significativa para ambos es más fácil que nunca. Así que, ¿por qué no aprovecharlo? No hay una mejor manera de conseguir una comunicación directa y fácilmente controlable con los clientes.
