La enseña de restauración ha señalado las Islas Baleares como su próximo objetivo de expansión, y en estos momentos ya se encuentra buscando locales en Palma de Mallorca, donde iniciará su implantación, y a la que le seguirá Ibiza. La franquicia Brasayleña cuenta con 25 locales y quiere abrir 15 más en los próximos tres años, para alcanzar un total de 40 en España.
La cadena de restaurantes de carnes asadas al estilo del rodizio brasileño Brasayleña busca situar su franquicia en las Islas Baleares. Se ha comenzado a hacer una búsqueda tanto de locales como de franquiciados por la zona y a corto plazo se quiere abrir un primer local en Palma de Mallorca que se ampliará a Ibiza.
Este crecimiento forma parte de la expansión que quiere acometer la enseña abriendo 15 locales más en los próximos 3 años y alcanzando las 40 unidades operativas. Este plan le llevaría a buscar nuevas ubicaciones con nuevos franquiciados que quieran crecer en ciudades en las que no estén presentes. En la actualidad la media de establecimientos por franquiciado es de dos. La franquicia Brasayleña, que cuenta con 25 locales en 12 provincias, crece anualmente de forma consolidada y apuesta por su marca manteniendo cerca del 45% de los restaurantes propios.
Además, durante el primer semestre del 2015, la cadena ha incorporado menús con todo incluido, el refill en los refrescos o la adaptación de los locales a los requerimientos de los clientes. Esto, junto con la mejora del consumo, ha dado como resultado un incremento en cifras comparables “de más del 10% en la afluencia y en el número de clientes que visitan las churrascarías”, según ha comunicado la enseña.
La franquicia Brasayleña ha invertido en sus restaurantes desde 2008 unos 10 millones de euros y ha creado más de 500 puestos de trabajo. Según la central, la compañía cuenta con un Ebitda promedio en sus tiendas propias próximo al 20%. El volumen de negocio que alcanzo la enseña en 2014 se acercó a los 20 millones de euros.
