La cadena de comida rápida ha presentado su campaña de comunicación «Hasta la Cocina», una apuesta por la transparencia en todos los ámbitos del negocio con la que pretende explicar en detalle el proceso de elaboración de sus productos. Además, KFC acaba de abrir en Lloret de Mar (Gerona) su restaurante número 73 en España, y el primero con un nuevo estilo de decoración.
La famosa marca de comida rápida KFC, especializada en productos de pollo recién empanado y propietaria de la mítica receta del Coronel Sanders, se compromete en su nueva campaña a contestar cualquier duda o pregunta de sus clientes. A lo largo de su historia la marca se ha visto rodeada de no pocas leyendas urbanas, entre ellas que tuvieron que cambiar su nombre original de Kentucky Fried Chicken por KFC porque no podían usar la palabra pollo.
Para combatirlas se ha lanzado “Hasta la Cocina”, una campaña desarrollada en colaboración de la agencia CHINA, con la que pretende conseguir que el público conozca los valores de la marca, e incluso ir más allá enseñando todos sus procesos, especialmente aquellos relacionados con su ingrediente estrella: el pollo.
En definitiva, KFC quiere invitar a sus clientes “Hasta la Cocina”, mostrándoles cómo llega el producto a cada restaurante, cómo se prepara, dónde se empana, quién realiza toda esta tarea… para demostrar que en la compañía no hay nada que esconder y que todo en el negocio es transparente.
Para la campaña se ha diseñado una estrategia de comunicación de 360º y que usará diferentes soportes en los restaurantes, las redes sociales y las webs –la corporativa y www.kfchastalacocina.com–, para seguir demostrando su compromiso con la Calidad.
Nuevo restaurante, nueva decoración
Por otro lado, KFC acaba de inaugurar un nuevo restaurante en la turística Lloret de Mar, en la comarca de la Selva de la Costa Brava. Se trata del primer local que la compañía abre en Gerona, y el 14º de Cataluña, donde la marca tiene una fuerte presencia principalmente en Barcelona.
El restaurante ocupa un amplio local ubicado en una de las principales calles de Lloret de Mar, la avenida Just i Marles, 1, justo frente a la playa. Cuenta con capacidad para más de 130 personas y ha supuesto la creación de 55 puestos de trabajo que serán ocupados en su mayoría por jóvenes de la localidad.
Se trata del primer restaurante que KFC abre en España con un nuevo estilo de decoración que pretende acercar a sus clientes los valores que constituyen su identidad de marca: “Producto de primera calidad, de los mejores proveedores locales, un producto auténtico y fresco, recibido a diario en cada restaurante, y empanado a mano en el momento”, señalan en un comunicado.
El de Lloret de Mar es el restaurante número 73 que KFC abre en España, 67 de los cuales son franquiciados, y seis de la propia compañía. El local estará gestionado por la empresa Classic Chicken SL, con una amplia experiencia en hostelería y ocio, ya que es propietaria de la discoteca “Tropics Beach Club”, el pub inglés “Piccadilly” y otros restaurantes de comida rápida de la zona.
