Según un estudio del Banco de la Reserva Federal de Saint Louis, que analiza 30 años de carrera profesional de mujeres, las pymes con políticas de conciliación consiguen mejores resultados de sus empleados y las que más rinden son las madres con dos hijos o más a su cargo. A raíz del creciente debate sobre la conciliación laboral y familiar, ya son muchas las empresas que apuestan por dar más flexibilidad y mejorar las condiciones de trabajo de sus empleados.
Para cuantificar la productividad, se analizó la cantidad de investigaciones publicadas por 10.000 mujeres que ejercen como profesionales académicas. Los resultados indican que las que no tienen hijos producen sustancialmente menos que las que son madres. La diferencia de productividad entre las mujeres con un niño y las que no tienen hijos es más moderada. Sin embargo, las madres con dos o más hijos a su cargo resultan ─según el análisis─ más productivas a lo largo de toda su carrera.
El estudio también pone de relieve que la capacidad de organización de estas mujeres es determinante para su productividad y rendimiento profesional. Ésta es también la opinión de la CEO de la empresa Stikets, Stephanie Marko, cuyo ecommerce de productos personalizados para familias cuenta con una plantilla mayoritariamente femenina con hijos menores de 6 años. Marko afirma, tal y como apunta el estudio, que las madres “tienen una elevada capacidad de planificación y organización del trabajo diario y eso se traduce en un mayor rendimiento laboral”. Asimismo, asegura que “la conciliación entre la vida laboral y familiar no es sólo una cuestión de horarios, como se suele plantear erróneamente, sino que debe ser una idea transversal, que se plasme de igual forma en los distintos ámbitos de funcionamiento de la empresa”.
Finalmente, el mismo estudio señala que los resultados se centran en mujeres que viven y trabajan en un entorno “privilegiado”. La paternidad fue planificada en la mayoría de casos y se beneficiaron de permisos y pagas de maternidad. Igualmente, unas condiciones laborales óptimas les permiten dedicar recursos y tiempo al cuidado de niños, sin renunciar a trabajar.