El tiempo es oro y vivimos un ritmo de vida ajetreado y lleno de tareas que realizar. Además, ser emprendedor, nos llena el día aún más con mil deberes pendientes que nos pueden volver locos. Para evitar esto y para aprovechar bien el tiempo, necesitamos una buena organización y hay una gran cantidad y variedad de herramientas a nuestra disposición para que todo este tiempo esté perfectamente optimizado. En Pymes y Franquicias sabemos cuales son tus necesidades, que eres una persona ocupada y queremos asesorarte.
Organizadores
La mejor idea para organizar las tareas y optimizar el tiempo es utilizar un organizador de tiempo a tu medida. Según las tareas que tengas que realizar, los tiempos que tardas en realizar cada tarea y los objetivos que quieres conseguir, necesitaras un organizador determinado. También deberías tener en cuenta el tiempo que tienes para realizar tus deberes. Identifica esos momentos libres del día y dedica todo ese tiempo al completo para finalizar esas tareas. Si tienes una hora disponible para realizar una tarea pero tartas 45 minutos en acabarla, media hora en el traslado y 10 minutos en sentarte a realizar la tarea… Algo está fallando en tu planificación. Analiza el tiempo real que tardas en hacer ese trabajo.
Programación
Para organizar bien las tareas hay que saber la importancia de las mismas. Hay tareas que son prioridad, deben hacerse y no pueden o no se deben dejar de lado. Algunas de estas tareas son dormir, comer y trasladarse. Estas tareas son imprescindible en tu horario y no deberías descuidarlas, ya que son de alta importancia y esenciales. Las demás tareas (llamadas de clientes, citas reservadas, etc.) no son más importantes que las anteriores mencionadas. Lo mismo deberías hacer con las tareas secundarias (priorizarlas por encima de las de menor importancia) y así hasta acabar de incluir y acabarlas todas. Este ejercicio te dará una visión general de tus tareas y de la importancia de las mismas.
Espacios para imprevistos
Por último, no importa el trabajo que realices y todas las tareas que hayas acabado. Siempre es importante dejar un pequeño espacio de tiempo para imprevistos. Nunca tenemos la certeza de las cosas que van sucediendo, por lo tanto, hay que dejar un pequeño espacio para emergencias. Otro espacio que deberías reservar son aquellos que destinarás para tus tareas personales (metas personales, citas personales, ocio, tareas caseras, etc). Más tarde, cuando realices la lista de tareas organizadas, podrás hacer un pequeño análisis sobre si la lista funciona, si es acorde al ritmo de vida que llevas y si hay algo que deberías cambiar.
