Hasta ahora, la intermediación inmobiliaria no había prestado excesiva atención al segmento del alquiler, hoy en auge. En este nicho pretende crecer la Oficina Provincial de Alquileres Urbanos (OPAU), una franquicia de alquiler de pisos que busca en esta fórmula expandirse ofreciendo a sus futuros socios un innovador modelo de negocio que elimina la intermediación en el mercado del alquiler y ofrece la garantía de una empresa que lleva en el sector inmobiliario murciano casi veinte años.
La franquicia de alquiler de pisos OPAU propone una nueva operativa en el mercado inmobiliario que consiste en centrar su modelo de negocio en las operaciones inmobiliarias de arrendamiento (una alternativa cada vez más demandada frente a la compra) y eliminar los intermediarios para que particulares y propietarios puedan negociar y reajustar sus condiciones si procediese.
OPAU aporta al sector de la franquicia inmobiliaria un saber hacer basado en casi dos décadas de experiencia y que consiste en poner a disposición del particular un servicio personalizado de ayuda en la búsqueda de inmueble en el que incorporan una exclusiva y extensiva bolsa de alquileres. De esta forma, el cliente se beneficia doblemente ya que recibe una atención mucho más optimizada y orientada a objetivos y, por otra parte, no tiene que asumir la comisión del alquiler.
El propietario, por su lado, también se favorece de este método ya que puede ofertar su inmueble de forma gratuita y multiplica las posibilidades de alquiler. Mediante este planteamiento del negocio, según comenta Sonia Campuzano, socia fundadora de OPAU, “se aprovechan las inmensas sinergias que se generan con los contratos de alquiler, un mercado en constante crecimiento y muy dinámico al que la mayoría de inmobiliarias no le prestan la atención y el trato personalizado que se merece”.
Condiciones de la franquicia OPAU
Para abrir una franquicia de alquiler de pisos OPAU se requiere una inversión inicial de unos 37.800 euros. Los locales, cuya superficie aproximada es de 90 metros cuadrados, deben estar situados en planta calle aunque no necesariamente en una localización muy comercial.
Respecto al perfil de franquiciado, OPAU quiere incorporar a su red a profesionales con un marcado carácter comercial, ambiciosos y con capacidad de liderazgo. La central, por su parte, se compromete a proveer al franquiciado un exclusivo método basado en casi veinte años en el sector, acceso al programa informático OPAU y formación específica para que aproveche al máximo las múltiples posibilidades que este negocio ofrece.