Tea Shop ha inaugurado su tienda número 100. Fue el pasado viernes en el Centro Comercial Vasco de Gama, en
Lisboa.
Con esta apertura, la enseña ya dispone de cuatro establecimientos en el mercado luso, especializados en la venta de té. Además de en Portugal, también tiene presencia en España, Brasil, Argentina e Italia.
El nuevo establecimiento ha abierto sus puertas en el considerado como uno de los centros comerciales top de Portugal. Inaugurado para la Exposición Universal del 1998, su imponente y espectacular estructura alberga 136 tiendas, 36 restaurantes, diversas salas de cine, un gimnasio y un parque infantil. Acoge una afluencia anual de 20 millones de visitantes al año.
Esta nueva tienda sigue el diseño de la marca, especialmente pensado para ofrecer un concepto comercial enfocado a elevar la experiencia del cliente, permitiendo que pueda
interactuar con los productos de una forma más autónoma: oler, saborear y conocer. Su exposición, así como su categorización por momentos de consumo y perfiles de consumidor permiten al cliente tener una experiencia más intuitiva.
Esta noticia es una gran alegría para toda la amplia familia Tea Shop, pero sobre todo para su Fundador, Per Sundmalm, quien abrió la primera tienda en Barcelona, en el barrio de Gràcia en 1990, con una visión: que los españoles, gozando de una amplia cultura gastronómica (aceites,quesos, vinos, espumosos…), amaran y disfrutaran del té, otro ingrediente gastronómico que, además de delicioso y delicado, podía brindar momentos saludables de relax y disfrute.
Ahora, y echando la vista atrás, Sundmalm recuerda esa primera tienda y se emociona cuando regresa a ella y los dependientes le transmiten saludos de clientes que ya acudían a la tienda 30 años atrás. Esa fidelidad es un gran motivo de satisfacción. De hecho, tiene claro cuál será el éxito de Tea Shop: «Si en 30 años regresamos a la tienda de Lisboa que acaba de abrirse y encontramos clientes que recuerdan ser los primeros en haber acudido, es un éxito rotundo como empresa y como marca».
